18 de Diciembre del 2018
En un terreno que correspondía al vertedero más grande de la Región Metropolitana en la comuna de San Bernardo, la Fundación Educacional Coshuenco inauguró este 2018 el Jardín Infantil Ángel Gabriel, que atiende a 120 niños vulnerables.
“Cuando nos invitaron a conocer el proyecto consideramos que era de excelencia. Tener la posibilidad de colaborar voluntariamente con una contribución anual para que niños con grandes necesidades reciban una educación inicial de calidad, que les permita salir del estancamiento social en el que viven, nos pareció una gran oportunidad”, cuenta Leyla Hirmas, socia de Vermehren y Cia.
El establecimiento, construido por la comunidad judía y el apoyo de Desafío Levantemos Chile, es un ejemplo de administración público-privada, gracias al financiamiento JUNJI y aportes del sector privado. Cuenta con una superficie total de 3.206 metros cuadrados, que incluye cinco salas, espacios de esparcimiento, recreación y áreas verdes.
Además, el jardín infantil se ubica a metros de un consultorio y colegio de primer nivel, construidos paralelamente en este sitio que anteriormente correspondía a un basural. “La idea es que estos niños de entre 3 meses y 6 años que reciben los beneficios de alimentación y educación pre escolar, posteriormente accedan al colegio y de esa forma la cadena virtuosa no se rompa”, agrega la abogada de Vermehren y Cia.
Sobre Fundación Coshuenco
Choshuenco nació en 2010 debido al interés de la familia Von Appen Lahres de contribuir a mejorar la calidad de la educación inicial de los niños y niñas que viven en situación de vulnerabilidad en nuestro país. Tiene como deber asumir la responsabilidad de potenciar las habilidades y competencias parentales, entregando las herramientas necesarias para llevar a cabo de la mejor manera posible. En la actualidad administra dos jardines y centros de padres (Colina y San Bernardo). A fin de año sumará un tercero y tiene en carpeta otro conjunto de proyectos en la Región Metropolitana.
El modelo educativo de Choshuenco tiene como centro el currículum norteamericano "High Scope". Desde este enfoque los niños son aprendices activos, es decir, construyen su comprensión del mundo a partir de su involucración activa con las personas, los materiales y las ideas
